La chica que vale la pena tener es aquella que no espera a nadie. – Scott FitzGerald
¿Y ahora qué?
Se apagó la estrella de reserva en la estación de mis caderas.
Algunos prefieren bombillas de bajo consumo
pudiendo haber tenido a la luna.
Que te follen,
pero mal,
y sufras carencias sentimentales,
miedo a la soledad,
conformismo crónico
e insomnio por dormir con otra que no soy yo.
Puedes quedarte los libros,
los CDs de los Burning,
y los abrazos que no viniste a darme;
yo me quedo a la chica.