Relatos
Y claro.
Y claro, la muy descarada entró tarde a clase y para colmo de mi corazón, se sentó a mi lado.
Y claro, la muy descarada entró tarde a clase y para colmo de mi corazón, se sentó a mi lado.
No sé qué día del año 1969 era exactamente. Eso no me importa. Viajé en un abismal tubo del tiempo