Anoche soñé contigo y seguías aquí.
Anoche soñé contigo, no tenías los ojos rojos ni un universo violáceo en las ojeras. Tu nariz era tu nariz y no aquella fosa …
Naufragio
No hay naufragio mejor que el de mis cabellos, cuando los mece la brisa fresca de la noche. La lluvia cae, estrellándose con rabia …