El tiempo no llama dos veces, pero nos cuelga tres.

No tengo miedo, pero vivo con la inseguridad de quien sabe que en cualquier momento se le va a caer la casa encima. Llevo demasiados escombros destiñendo la habitación en el ventrículo izquierdo de las torres que has ido derrumbando y yo sigo estando hecha una ruina, pero ahora sé mirarte a los ojos y… Seguir leyendo El tiempo no llama dos veces, pero nos cuelga tres.

Estaciones en curva

Hace unas horas, todo eran copas, todo puntuaba en positivo y, por un momento, la felicidad parecía estar en alza. Después, como todas las noches, llego a la conclusión de que bebo más por afición a la nostalgia de las resacas que por la euforia transitoria del punto alto de la borrachera.   A las… Seguir leyendo Estaciones en curva