Hay un paraíso donde el mundo ansía llegar,
sin fronteras ni razón, lleno de embriaguez y paz.
Hay un paraíso que el cielo no da fe,
corriendo desnudos y con risueña tez.
Hay un paraíso que creemos temer,
contradicción mundana porque evitamos perder.
Hay un paraíso donde el mundo desea escapar,
entre tinieblas, si es necesario, y sin música ni compás.
Hay un paraíso que no es la propia muerte,
ni es la propia vida que habita en la mente.
Hay un paraíso que de recuerdos se vacía,
que trotamos hacia él tan pronto como nos guía.
Hay un paraíso que no se cura con paraísos,
que buenos y malos recuerdos se borran y son masacrados.
Hay un paraíso de olvido que esperamos volver a empezar,
nueva vida de amor y nuevo daño a instaurar.
Hay un paraíso que es como el infierno mismo,
paraíso de huidas, dolor y enemigos.
Hay un paraíso que es el simple olvido,
de tranquilidad nos llena y los ojos cubrimos.
Olvido. Amor. Olvido.
Paraíso escondido.
Marina Crovetto